Los síntomas del embarazo acaban siendo tan conocidos que se obvian o incluso se confunden con síntomas de otras dolencias relacionadas con el aparato reproductor. Puede parecer raro, pero desde Mundofertilidad hemos creído importante recordar estos síntomas (los más frecuentes) y explicarlos.

Síntomas del embarazo

• Pérdida de la regla: este tipo de alteraciones en el período menstrual deben tenerse en cuenta, sobre todo, en personas que tienen una regla regular pero, de repente, se retrasa.
• Pequeñas pérdidas de sangre: estas pérdidas suelen ser muy breves (entre 2 y 4 días) y de poca cantidad, sobre todo en las dos primeras semanas tras la concepción. Pese a que suela ser normal, dentro de lo que cabe, siempre vale la pena consultar con el doctor para evitar y/o detectar complicaciones o problemas.
• Vómitos o náuseas mañaneras: las náuseas son uno de los síntomas más comunes durante el primer trimestre de embarazo. Si bien es cierto que suelen aparecer por la mañana, no tienen porque ser únicamente así pudiendo surgir en cualquier momento.
• Vértigos: este síntoma es uno de los más comunes en las mujeres debido a que el embarazo cambia los niveles hormonales, provocando diversas alteraciones en el organismo. Todo ello provoca no sólo vértigos, también una alteración de los niveles de azúcar, de tensión y de anemia.
• Cansancio o somnolencia: el aumento de la hormona progesterona provoca que, durante el primer trimestre de embarazo, la mujer se sienta más cansada. Tras el primer trimestre, la futura mamá recupera la energía.
• Cambios hormonales: como ya comentábamos, los cambios hormonales son el primer síntoma interno que la mujer experimenta en cuanto queda embarazada. Todos ellos le provocan otros síntomas, pero también le acondicionan el cuerpo para alojar a su futuro hijo.
• Acné: éste es causado también por las alteraciones hormonales, las cuales pueden convertir en más grasa la piel de las mamás. Tanto el acné como los puntos negros pueden aparecer a lo largo del embarazo, sin importar el trimestre.
• Hinchazón o dolor de pechos: el aumento de progesterona y de estrógenos también provoca que los pechos de las mujeres aumenten su tamaño y se vuelvan más sensibles. La aparición de este síntoma aparece justo cuando la mujer concibe el embarazo, aunque también puede ser que surja debido a la menstruación.
• Aumento de la temperatura corporal: este síntoma puede deberse no sólo al embarazo, también a un proceso vírico por ello no es de los más característicos de una nueva concepción.
• Gases: este síntoma suele aparecer en mujeres que deban estar horas sentadas, en trabajos de oficina o de atención al cliente.
• Alteración del olfato, del paladar y aversión a olores: las mujeres suelen cambiar su gusto por determinados alimentos que come o bebe habitualmente. De hecho, los sabores suelen cambiar o intensificarse, los olores suelen percibirse más y más potentes, etcétera.
• Cólicos o dolor abdominal: las alteraciones de tamaño que sufre el útero suelen causar molestias y dolores a las mujeres, así como los sangrados comentados anteriormente.

Los síntomas no tienen porque aparecer de igual forma en todas las mujeres, incluso existen casos en los que no se tienen síntomas y la mujer no se entera de la concepción hasta pasado unos meses.