Un reciente estudio resalta la eficiencia de la histeroscopia como tratamiento en casos de embarazo en cicatriz de cesárea
Un reciente análisis retrospectivo, publicado en la revista BMC Pregnancy and Childbirth, destaca la histeroscopia como un procedimiento prometedor para el tratamiento de embarazos localizados en la cicatriz uterina resultante de cesáreas previas. Esta condición, conocida médicamente como embarazo en cicatriz de cesárea (CSP, por sus siglas en inglés), aunque poco frecuente, es una complicación que puede conllevar significativos riesgos para la salud materna.
Durante el periodo comprendido entre 2017 y 2023, se diagnosticaron 521 casos de CSP en el Hospital de Taizhou, adscrito a la Universidad de Zhejiang en China. De estos casos, 45 pacientes fueron tratados mediante histeroscopia, dividiéndose en dos grupos: uno sometido a eliminación directa del tejido gestacional bajo visión histeroscópica y otro tratado con una combinación de histeroscopia y succión al vacío.
El estudio detalló que la técnica de succión al vacío, en combinación con la histeroscopia, se asoció a una disminución significativa tanto en la pérdida de sangre como en los costes de hospitalización. Asimismo, el tiempo de operación y la duración de la hospitalización se redujeron notablemente en comparación con el grupo tratado con histeroscopia solamente. Esta técnica combinada resultó además en una menor incidencia de complicaciones, evidenciando la ausencia total de perforaciones uterinas, a diferencia del grupo de eliminación directa, donde se registraron tres casos que requirieron reparación laparoscópica durante la cirugía.
La problemática del CSP ha adquirido mayor notoriedad en los últimos tiempos debido al incremento de las tasas de cesáreas a nivel mundial, y la existencia de un tratamiento efectivo y seguro es crucial para evitar complicaciones como hemorragias masivas, el espectro de acretismo placentario y la ruptura uterina. La terminación del embarazo tras el diagnóstico de CSP es comúnmente recomendada para prevenir estos riesgos.
En cuanto a los resultados reproductivos futuros, el estudio apunta que la función reproductiva se preservó en la totalidad de las pacientes, subrayando la importancia de este aspecto dado que muchas mujeres desean mantener su fertilidad después del tratamiento. Cabe destacar que el estudio aboga por realizar investigaciones prospectivas multicéntricas con muestras más amplias para ratificar los hallazgos obtenidos.
Uno de los dilemas que el estudio señala es el estado del divertículo de la cesárea tras la histeroscopia, lo cual podría acarrear problemas como menorragia, infertilidad y riesgo de CSP recurrente, así como la potencial ruptura uterina en embarazos subsecuentes. Por esta razón, se sugiere profundizar en la investigación acerca de la fertilidad post-tratamiento de CSP mediante histeroscopia.
Si bien el estudio arroja resultados positivos sobre la histeroscopia combinada con succión al vacío frente a la eliminación directa histeroscópica, cabe mencionar las limitaciones inherentes al diseño retrospectivo y al tamaño limitado de la muestra, lo que subraya la necesidad de una investigación futura más robusta. Los resultados de este estudio han sido reconocidos por expertos de la comunidad médica internacional y prometen mejorar el manejo clínico del CSP, reforzando el rol de la histeroscopia como una herramienta clave en la salud reproductiva de la mujer.